de Venezuela tras permanecer cuatro meses preso en la cárcel para pandilleros de
, donde asegura fue víctima de abuso sexual.

Llegó a
Capacho, en el estado
Táchira (al oeste y fronterizo con Colombia), a bordo de un todoterreno de la
Guardia Nacional. Desde la ventanilla trasera saludaba a la comitiva de amigos, familiares y vecinos que lo recibió con gritos de celebración.
"¡Andry, Andry, Andry!", gritaban mientras saltaba del vehículo para abrazarse con sus padres, que le dieron la bienvenida.
Hernández partió rumbo a
Estados Unidos en
mayo 2024 con la ilusión de mejorar su
situación económica y escapar de la
discriminación a la comunidad LGBTQ+, a la que pertenece y que se acentúa en los pueblos pequeños de Venezuela.
Nunca entró a suelo estadounidense, fue retenido primero en una prisión de migrantes y luego enviado al
Cecot.
"Salí de mi casa con una maleta llena de sueños, con sueños de ayudar a mi pueblo, de ayudar a mi familia, pero lastimosamente esa maleta de sueños se convirtió en una maleta de pesadillas, una pesadilla que pensé que nunca iba a terminar", dijo a periodistas al llegar.
"Gracias por tanto cariño que me tienen y demostrarme que nunca estuve solo, que nunca estuve solo en esa prisión de máxima seguridad".
Mostró los
tatuajes de coronas en sus muñecas por lo que le señalaron de pertenecer al
Tren de Aragua, pretexto para su envío a la
megaprisión construida por el
presidente Nayib Bukele para encerrar a
pandilleros.
El
fiscal general Tarek William Saab divulgó el lunes un video en el que
Hernández dijo haber sido abusado sexualmente por los carceleros del Cecot.
Su caso fue acompañado de cerca por
organizaciones internacionales de defensa de derechos humanos.
En el barrio popular
Los Pescadores en
Maracaibo, estado Zulia (oeste), unas cien personas se congregaron en un servicio religioso este miércoles para agradecer por el retorno de cuatro vecinos presos en
El Salvador. Edwuar Hernández, Ringo Rincón, Andy Perozo y Mervin Yamarte volvieron a Maracaibo el martes, recibidos por una multitud que se aglomeró en las polvorientas calles de esta comunidad. "Hoy estamos en este lugar en acción de gracias", dijo
Erick Tarre, pastor evangélico de 62 años.

"Estamos llenos de alegría, aquí tenemos a nuestros muchachos", celebró por su parte Jair Valera, quien usó su cuenta de TikTok con más de 60.000 seguidores para denunciar el traslado de sus vecinos al Cecot.
Con sus brazos extendidos y su mirada hacia el cielo,
Mervin Yamarte agradeció su libertad.
"Gracias papa Dios", susurró entre lágrimas junto a sus compañeros en la prisión salvadoreña.
La liberación de estos 252 migrantes fue producto de un canje de prisioneros en el que Venezuela entregó a Estados Unidos a 10 ciudadanos y residentes permanentes de ese país.
Fuente: AFP