. Advierten sobre precipitaciones de hasta 17 centímetros por hora, que representan una amenaza
para la población.
, incluidas algunas que se aferraban a los árboles, fueron rescatadas después de la tormenta con hasta 38 centímetros de lluvia en la región montañosa del estado, según los datos entregados por el
.
Cuestionamientos a las autoridades
Al
tercer día de la tragedia, se suman más voces a la
gestión del servicio meteorológico y también por los recortes en la
administración Trump. El servicio emitió las
alertas de las precipitaciones la madrugada del viernes, pero se preguntan si se emitieron las suficientes advertencias y si se hicieron los
preparativos necesarios.El agua subió 8 metros en el río Guadalupe en solo 45 minutos antes del amanecer del viernes, arrasando con casas y vehículos. Medios como CNN señalan que “el equivalente a cuatro meses de lluvia cayó en apenas unas horas”.
Las
autoridades locales han insistido en que nadie vio venir el potencial de
inundación y han defendido sus acciones. Testimonios señalan que el viernes 4 de julio, feriado por la
Independencia de Estados Unidos, vieron los
pronósticos del clima y nada parecía alertar lo que vendría después.
Las primeras alertas se emitieron la tarde del jueves, con predicciones de caída entre los 12,7 y 17,8 centímetros de lluvia. El viernes por la mañana las alertas fueron las solicitudes de evacuación.
Los funcionarios locales han dicho que no esperaban esa intensidad, que equivalía a meses de lluvia para el área. Una respuesta similar a la del Gobierno federal.
“Sabemos que todos quieren más tiempo de advertencia, y por eso estamos trabajando para mejorar la tecnología que ha sido descuidada durante demasiado tiempo para asegurarnos de que las familias tengan la mayor anticipación posible”, dijo la secretaria de Seguridad Nacional de Estados Unidos, Kristi Noem.
¿Afectaron los recortes de la Administración Trump?
Las críticas también apuntaron a la
administración Trump. Los expertos cuestionaron si los recortes de personal implementados en las agencias federales, incluida la agencia que supervisa el
Servicio Meteorológico Nacional, habían dejado a los funcionarios incapaces de predecir con precisión la gravedad de las inundaciones y emitir advertencias apropiadas antes de la
tormenta."The Independet" revelaba que casi 600 personas han abandonado el Servicio Meteorológico Nacional en los últimos meses debido a despidos o jubilaciones. En la actualidad, dijo el medio, “al menos ocho de las 122 oficinas en todo Estados Unidos que normalmente ofrecen cobertura meteorológica las 24 horas del día, los 7 días de la semana, no pueden hacerlo”.
CNN habló con
Tom Fahy, director legislativo del sindicato de empleados del Servicio Meteorológico, y explicó que si bien cree que las oficinas tenían
“personal y recursos adecuados”, a la
oficina de Austin-San Antonio le falta un meteorólogo coordinador de alertas. El medio explica que es “un rol que sirve como vínculo directo y crucial entre los pronosticadores y los
administradores de emergencias”.
Mientras que el exdirector de la
Administración Nacional Oceánica y Atmosférica, Rick Spinrad, dijo que no sabía si esos recortes de personal influyeron en la falta de alerta previa sobre las inundaciones extremas en Texas, pero que inevitablemente degradarían la capacidad de la agencia para entregar pronósticos precisos y oportunos.
Declaración de zona de desastre
El sábado, el gobernador de Texas, el republicano Greg Abbott, dijo que había pedido a Trump que firmara una declaración de desastre para desbloquear la ayuda federal para los afectados.
“Estas familias están sufriendo una tragedia inimaginable con tantas vidas perdidas y tantas más aún desaparecidas", agregó.
La
Agencia Federal para el Manejo de Emergencias se activó el domingo y ha desplegado recursos para los
servicios de emergencia en Texas; así lo informó el
Departamento de Seguridad Nacional en un comunicado.
Helicópteros y aviones de la Guardia Costera de Estados Unidos están ayudando en los esfuerzos de búsqueda y rescate, dijo DHS.El presidente Donald Trump declaró el domingo al condado de Kerr una zona de desastre. Trump dijo en una publicación en redes sociales que el propósito de la declaración es "garantizar que los rescatistas reciban los recursos que necesitan de inmediato”.
Alerta por más lluvias, entre oraciones de las familias
En medio de la búsqueda de sobrevivientes y víctimas, se esperan más lluvias en la zona el domingo. El Servicio Meteorológico Nacional ha emitido una alerta de inundación repentina para Kerr, epicentro del desastre.
Sin embargo, las labores de búsqueda continúan y las familias también organizaron este domingo una misa especial para orar por las víctimas de las inundaciones y también para pedir por todos los desaparecidos.
Univisión difundió las imágenes de la celebración en vivo, dirigida por el
arzobispo Gustavo García. Los familiares y vecinos de las víctimas, arrodillados, con la cabeza baja y las manos en su pecho, pidieron por cada residente de
Texas que hoy ya no está vivo.
“Me gustaría expresar mis sinceras condolencias a todas las familias que han perdido seres queridos, en particular a sus hijas que estaban en el campamento de verano, en el desastre causado por la inundación del río Guadalupe en Texas en Estados Unidos. Rezamos por ellos”, dijo desde Roma el papa León XIV, que ofreció el domingo oraciones especiales por los afectados por el desastre.
France 24